La Notable Respuesta de Neil deGrasse Tyson a una Madre acerca de la Religión de su Hijo

Domingo, 27 de Febrero del 2017

Estimado Dr. Tyson.

Quería enviarle una nota porque estoy teniendo una discusión con mi hijo de 10 años. Hemos estado haciendo lo que generaciones anteriores a mí han hecho. . . enviando a mi hijo a la escuela hebrea. Lo enviamos para que pueda aprender sobre su religión y de dónde viene.

Sin embargo, mi hijo, que por cierto está en el espectro del autismo, me dijo anoche que la escuela hebrea es ridícula porque él no cree en Dios, sino en la ciencia. Él cree que las historias bíblicas simplemente no pueden ser ciertas. Y la verdad es que no puedo negar que podría tener toda la razón.

Cuando le pregunté de dónde sacó muchas de sus ideas, dijo "Cosmos", así que sé que cree y respeta lo que usted enseña. (y, ¡gracias por eso!) MI pregunta es. . . son ambos posibles? ¿Cree que podría haber un poder superior ahí fuera, o que la ciencia y la fe PUEDEN encontrar un terreno común?

Pregunto porque respeto a mi hijo lo suficiente como para que él tenga sus creencias, y no quiero imponerle nada que no pueda probarse que sea cierto. Sé que usted es un hombre ocupado, pero estoy trabajando para ser una buena madre.

Estoy muy agradecida por tomarse el tiempo de leer esto.

Sinceramente, Ingrid

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Viernes de Pascua, 30 de Marzo del 2018

Una respuesta vergonzosamente tardía a su atento correo electrónico. El universo me ha mantenido bastante ocupado últimamente, pero finalmente recibo todos mis correos electrónicos.

Por supuesto, en un país libre, dentro de los límites, puede criar a sus hijos como lo desee, en cualquier sistema de creencias que elija. Por esta razón, la mayoría de las personas en el mundo que son religiosas, practican la religión de sus padres. Por ejemplo, las posibilidades de que los cristianos críen a un niño que luego se convierte en musulmán, o una familia musulmana que críe a un niño que luego se convierta en judío son extremadamente raras. Es más probable que los niños crezcan sin creer en dioses que en los dioses de otras religiones.

Por lo tanto, la necesidad de criar a su hijo como judío devoto y practicante, siéndolo uno mismo, es completamente normal y natural. Pero, por supuesto, tiene, a lo sumo, solo 18 años de influencia directa sobre él. Su hijo pasará más del ochenta por ciento de su vida bajo un techo diferente al suyo.

Por lo que he visto y encontrado, el judaísmo se manifiesta a través de una amplia gama de prácticas, desde judíos envalentonados que comen tocino con entusiasmo hasta las diversas sectas de judíos ortodoxos que, entre otras prácticas, mantienen utensilios de cocina separados para lácteos y carne. Como científico, tengo mucha más experiencia con judíos ateos. No ven la Torá como la palabra de Dios. Lo ven como un libro de historias, no para ser juzgados por su verdad o falsedad, sino como un depósito de ideas de las que se puede derivar la sabiduría para vivir la vida.

Piénselo. Cuando leemos cuentos de hadas, no los juzgamos por si son verdaderos o no.

En cambio, aplicamos las lecciones derivadas de ellos en nuestra visión del mundo. No solo esto, los judíos ateos comúnmente celebrarán las altas fiestas con no menos ritual que los judíos practicantes, hasta dejar un asiento abierto en la mesa del Séder para Elías, y asegurarse de que la puerta principal esté abierta, para que pueda entrar si aparece.

¿Por qué un judío ateo haría esto? La respuesta no es difícil. Los rituales y las tradiciones representan algunas de las fuerzas vinculantes más fuertes entre los pueblos del mundo. Asistir a misa los domingos para los católicos. Oración cinco veces al día por los musulmanes. Culto a los antepasados de las religiones animistas. Uno puede participar sin juzgar si los eventos que establecieron el ritual tienen alguna verdad literal. La participación crea un sentido de comunidad, que casi siempre ha aportado valor a la civilización. Interrumpe la civilización solo cuando las personas requieren que otros compartan sus rituales particulares, con amenaza de fuerza para lograrlo.

Al estar en el espectro autista y que le guste la ciencia como lo hace, su mejor apuesta podría ser no imponer el literalismo de nada religioso, sino mantenerlo conectado a las hermosas tradiciones de la religión y enfatizar el valor del ritual como semilla y raíz principal de comunidad. A menudo, eso solo representa el mayor desafío al criar niños autistas: lograr que adopten el valor del amor y la compasión por las personas y las relaciones.

Tenga la seguridad de que puede criar a un niño sano, inteligente y respetuoso de la ley sin requerir que crea que Moisés convirtió un bastón en una serpiente, o que el maná cayó del cielo.

Buena suerte. En mi experiencia, se necesita algo de eso también.

Feliz Pascua para los dos.